Antiguo molino harinero, cuidadosamente reconvertido en casas rurales, situado en plena naturaleza, en un entorno especialmente bello, rodeado de agua, vegetación y fauna autóctona.
El río Mayor, que pasa por la finca, se desvía en la presa del molino haciendo que una parte de su cauce circule por el caz hasta la casa, y haciendo que su fuerza mueva la turbina que nutre de energía a la vivienda.
Las casas tienen una especie de granja con animales domésticos, como perros, gatos, gallinas, etc., y rodeándolas un bello entorno natural, en el que podrá pasear, disfrutar de la lectura, de las actividades que ofrecen sus dueños o simplemente descansar con la tranquilidad del paso de las aguas o el canto de los pájaros debajo de una buena sombra.