Principales atractivos
Su torre del homenaje es imponente, por sus matacanes en la parte superior, los escudos heráldicos labrados, y la lápida conservada a sus pies, que habla de quien mandó erigirlo.
Historia y descripción
Recorriendo su exterior, encontraremos grandes contrafuertes que refuerzan la muralla, y observaremos que las torres de los extremos adquieren forma de espolón, para adelantar la defensa y ser más efectivas contra posibles ataques. Al pie de la torre principal encontramos una lápida en latín, que afirma ser el italiano Gabriel Condulmario quien promovió su construcción en 1473.
El interior conserva el horno, un pozo, huecos excavados en la roca, quizá para almacenaje, y las antiguas mazmorras, que hoy se usan como cuadras y bodegas.
Su origen data del siglo XII, cuando la población fue capital de los feudos de los obispos de Cuenca. La actual fortaleza parece tener relación con la guerra civil castellana que sostuvieron Juana la Beltraneja e Isabel de Castilla por el trono.
Acceso al castillo
De propiedad privada, sólo puede visitarse su exterior.
Curiosidades
El llamado Molino de Viento es en realidad un torreón de vigilancia de la localidad, del que no se tienen noticias ciertas, pero que merece la pena visitar, por su escalera interior de caracol, y su pintoresco aspecto.