- Zafra de Záncara
Municipio asentado en la mancha conquense, cuyo casco urbano es un conjunto limitado a un centenar de casas que ocupan la culminación de uno de los asentamientos más interesantes de la provincia, en cuanto a su enclave topográfico posiblemente motivo de su fundación como paso defensivo, sobre un elevado cerro y sobre su ladera norte en fuerte pendiente. Bajo este cerro discurre el río Záncara y el trasvase Tajo-Segura.
- Molino de viento – Zafra de Záncara
Zafra de Záncara, su nombre proviene del árabe sazja que significa peña, ya que su ubicación peina la cresta de la roca cayendo por su ladera.
- Museo de Arte Sacro de Palomares del Campo
El Museo está dentro de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI. Claramente de estilo renacentisas pero con motivos góticos muy evidentes. En Palomares del Campo confluyen y se difuminan los contornos de la sierra, La Mancha y la comarca alcarreña. Una tonalidad heterogénea muy visual y efectista.
- Palomares del Campo
Villa manchega que se halla comprendida en la comarca conquense de la Mancha Alta, aunque es una zona de transición donde no se puede fijar con precisión una línea divisoria natural -sino visual- que nos pueda determinar el principio y fin de las tres comarcas ( Sierra, mancha y Alcarria) manifiestamente distintas, que confluyen en un espacio de pocos kilómetros, cercano al termino de dicho pueblo.
- Castillo de Huerta de la Obispalía
Su torre del homenaje es imponente, por sus matacanes en la parte superior, los escudos heráldicos labrados, y la lápida conservada a sus pies, que habla de quien mandó erigirlo.