El Claustro de la Mona, es un extraordinario conjunto arquitectónico del siglo XVI, en que destaca la llamativa restauración de las cerámicas que lo cubren, completada con la restauración del claustro en general, del jardín central, y de la plantación de un cinamomo en el mismo, haciendo referencia al origen de su nombre.
Fue usado para la celebración de procesiones en el Convento de las Comendadoras, e ilustra a la perfección la característica común a los conventos toledanos. La cual consiste en incorporar estruturas urbanas a lo largo de los siglos, hasta crear complejas arquitecturas con elementos artísticos muy distintos.
Foto: José María Moreno Santiago