Palomera, en la comarca de La Serranía a orillas del río Huécar, reclama su protagonismo en la provincia de Cuenca y sobresale por su identidad del fondo de su valle. Su nombre viene de la abundancia de palomas y palomares de la zona. Su mayor atractivo estriba en su conjunto urbano donde un núcleo de viviendas medievales se agrupan en torno a la cale principal, y nos transportan a su época camino de la Plaza Mayor. Todo ello silueteado en el mapa por la Hoz del Huécar, que nace cerca y se enseñorea en Palomera siendo un componente del paisaje integrado en la población como elemento imprescindible, armónico y distintivo.
La Iglesia Parroquia de San Justo y Pastor de una sola nave y ábside hexagonal del siglo XV destaca en su interior por el artesonado de alfarjía y sus bellos herrajes. La Casona de la Posada, con un claro sabor al siglo XV destaca entre los edificios de la villa. Junto al río un viejo molino nos muestra su entramado de viguería y casi al límite del pueblo un conjunto de pajares, ligados a la eras, conservan el rulo de piedra para acondicionarlas.
En las inmediaciones el asentamiento de Molinos de Papel nos muestra el caserío que nació a la sombra de la actividad industrial y que tuvo una gran importancia por la calidad de sus resmas desde el siglo XVI y continuando, en algunos de ellos, hasta principios del XX.
Horarios y acceso
Acceso CU-914