- Castillo de La Torresaviñán
Es uno de los pocos castillos románicos que no ha sufrido transformaciones posteriores: podemos conocerlo tal y como fue erigido en el s. XII. La tosquedad de sus acabados es netamente militar y fronterizo, sin lugar para comodidades.
- Parque Natural Barranco del Río Dulce
La Hoz cuenta con numerosos escarpes de variada morfología, incluyendo abrigos, formas pétreas en proa de barco, arcos de piedra, tormagales, setas y agujas. Varios escarpes laterales o fluviales dan lugar a cascadas. Las laderas presentan localmente llamativos caos de bloques desprendidos y vertientes regularizadas con gelifractos.
- Castillo de Pelegrina
Descubre este castillo mientras recorres la Ruta de los Castillos de la provincia de Guadalajara por los nobles castillos del Señorío de Sigüenza.
- Castillo de Sigüenza
El Castillo de Sigüenza, convertido en Parador Nacional, remata con su gallarda y solemne silueta el perfil de la ciudad, en la que, vista de lejos, se confunden las torres de la catedral, los chapiteles de los templos románicos y los frontispicios de palacios y conventos, con la algarabía tierna de la arquitectura popular genuína de estas sierras ibéricas. Resultando el conjunto de la ciudad seguntina, desde cualquier perspectiva, inolvidable y sorprendente.
- Museo Diocesano de Arte Antiguo
El Museo Diocesano de Arte Antiguo de Sigüenza expone una importante muestra de arte sacro de los siglos XII al XX, además de otras colecciones de arqueología, textiles y manuscritos, procedentes de todos los rincones de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara. En total son unas 220 obras de artistas tan destacados como Zurbarán, Salzillo, Salvador Carmona, Morales o Francisco Madrazo.